Es una neoplasia o tumor de piel bastante frecuente en nuestras mascotas.
Razas como el bulldog francés, setter inglés, bóxer, Golden o labrador retriever, shar pei o el pitbull terrier están predispuestas.
Puede salir en cualquier parte del animal y suele tener forma redondeada y de aspecto rosáceo-rojo, como si fuera un botón.
El diagnóstico se hace mediante citología (foto adjunta) que es una técnica que no entraña riesgo para las mascotas y nos da un diagnóstico certero.
Su tratamiento depende del tipo de mastocitoma que es, pero generalmente la cirugía quitando la masa suele ser resolutiva.
Lo importante es que ante cualquier “bulto” que encontréis en vuestras mascotas nos consultéis para poderos ofrecer la mejor opción de tratamiento.