1. Lo primero e imprescindible, PIDE CITA PREVIA, así conseguiremos que este menos tiempo en la sala de espera evitando el estrés extra que ello le provoca.
  2. Infórmanos del carácter de tu gato y cómo suele comportarse en otras visitas al veterinario. De esta forma le conoceremos mejor y podremos recomendarte pautas mas concretas.
  3. Trasportín ideal: El trasportín ideal desde nuestro punto de vista, es un trasportín rígido con puerta de rejilla(metálica o de plástico) y que permite que en consulta retiremos su parte superior y así podamos explorar al gato mientras permanece tranquilo en él sin necesidad de forzarle a salir. Además es fácilmente lavable y protege al gato de golpes.
  4. Para introducir al gato dentro del trasportín, tómate el tiempo suficiente, una media hora antes de salir de casa debería bastar.

    Si no tiene que estar en ayunas, coloca dentro un poco de comida húmeda o algo que le guste mucho para intentar que entre solo. Coloca el trasportín sin tapa en un lugar elevado, anímale a que entre y pon la tapa (necesitarás ayuda para mantenerle tranquilo dentro). Si no cuentas con ayuda, coloca el trasportín cubierto en un lugar elevado y anímale a entrar.

  5. Por último, si te es imposible introducirlo en el trasportín, o a pesar de estas medidas tu compañero tiene experiencias muy desagradables, hay medicamentos que pueden ayudar a tu gato. Pregúntanos previamente para que te facilitemos el más recomendable para él.

Detalles para
mejorar ese traslado:

Mantenimiento del
trasportín en casa:

  • En casa puedes dejar el trasportín al alcance del gato para que lo use, descanse, reciba algún premio… y así no será un objeto extraño para él.
  • Si tu gato ha sentido miedo en el trasportín lávalo con agua y jabón para eliminar las feromonas de estrés
  • Cada cierto tiempo, coloca catnip en su interior, o bien ofrécele comida que le guste mucho dentro del mismo trasportín.